En la vertiente Oeste del pico Cebollera, existe una dehesa boyal que guarda una de las reliquias botánicas que aún nos quedan en la región de épocas glaciares.
Está considerado como uno de los bosques más hermosos de la Comunidad de Madrid, ya que su enorme variedad: acebos, robles, cerezos, avellanos, servales y, sobre todo, abedules, hacen de éste un lugar espectacular, sobre todo cuando llega el otoño y los contrastes de colores entre las diferentes especies se hacen más patentes.